¿Presente, en piloto automático?

El lugar donde te encuentras, se llama: Aquí

«¡Detente!
Los árboles al frente y los matorrales a tus lados no están perdidos.
El lugar donde estás se llama AQUÍ, y tienes que tratarlo como a un desconocido poderoso,
tienes que pedir permiso para conocerlo y que te conozca.
El bosque respira. ¡Escucha!
Este contesta,”he creado este lugar a tu alrededor, si te vas quizás vuelvas otra vez,
Es decir AQUÍ.
No hay dos árboles iguales para el cuervo.
No hay dos ramas iguales para el gorrión.
Si en ti se pierde lo que un árbol o un matorral hace,
de seguro estás perdido.
¡Detente!
El bosque sabe dónde estás.
Déjale que te encuentre.»
David Wagner

coaching sesiones online

El presente es la toma de partido de todo proceso de coaching. Partimos del presente para lograr el estado deseado. Aunque el presente es un estado bastante particular porque está lleno de nuestro pasado, y ávido de nuestro futuro, es preciso acotarlo a su condición presente.

Cómo es mi presente

Es posible que estés pensando en un cambio a partir de una situación particular que pasaste. La necesidad de cambio surge a partir del análisis que hiciste de tu presente. Recuerda lo que tuviste que vivir para decirte: ¡Así no puedo seguir, necesito un cambio!

La llave para lograr que tu presente sea como querés, depende únicamente de ti. La decisión del cambio está en tus manos, más bien en tu mente. Sé que suena algo trillada la frase, aunque te puedo asegurar que es cierto.

Nuestro presente es el resultado de nuestro mapa interior. Es decir, el modo en el percibimos el modo en el que vivimos. Aquello que pensamos ordena, de alguna manera, nuestras acciones. Es por eso que el cambio depende, básicamente, del modo en el que pensamos. En concreto, pretender cambiar el mundo en el que vivimos porque no nos gusta, es una hermosa fantasía. Aunque podemos cambiar el modo en el que percibimos el mundo, así cambiar nuestra conducta, y tal vez entonces, podamos cambiar el mundo.

Mi presente está en piloto automático

Es posible que ante la necesidad de cambiar te dieras cuenta de que vivís en modo automático. Hacés todos los días las mismas cosas, sin presentar la mínima atención en lo que hacés, o al menos dándole atención de calidad. Esto quiere decir que no estás reparando conscientemente -en lo más mínimo- en lo que estás pensando, más bien estás repitiendo los caminos de siempre, con los que te sentí a gusto.

Lograr una atención de calidad sobre nuestro presente, nos va permitir reparar en lo que hacemos en detalle, así podremos de reparar en lo que pensamos antes de hacerlo, durante y después. Es decir, nos permitirá delimitar la ruta que sigue esa conducta que repetimos a diario. Qué nos motiva a hacerlo, cómo nos sentimos mientras que lo hacemos, e incluso luego.

Como habrás notado, al situarnos en el presente con una atención de calidad, podremos no sólo definir qué es lo que pensamos, sino también comenzar a observar cómo sentimos en función a esos pensamientos. Observar los pensamientos y lo que nos sucede –a nivel corporal- nos permitirá entendernos y entender la ruta que hacemos para actuar como lo hacemos.

La información que obtenemos de nuestro presente a partir de la atención de calidad, te servirá para comenzar a trabajar en ese cambio que quieres darle a tu vida y logar tus metas. Recuerda que para cambiar es necesario conocerse a sí mismo, y para eso es necesario conocer tu mente.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.